Floren dijo:
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Perdonad si molesto con mi pena, mi rabia y mi impotencia.
A veces reconforta pensar que si Dios existe abrasará alguna vez a esa banda de ladrones, canallas, asesinos y vesánicos criminales que nos gobiernan, robándonos, engañándonos, torciendo sangre y lágrimas en oro para sus insaciables bolsillos. Pero no, Dios no debe existir o no debe ser bueno. Si lo fuera no tendría mal alguno que oponer a este mal. Es dificil no odiar a quienes roban y matan en tu nombre, envolviendo sus crímenes con justificaciones pueriles y palmariamente falaces con lo que, además, nos toman por imbéciles. ¿Estarán acertados en esto último?
Al menos por mi parte no hay nada que perdonar, es más, sospecho que más de uno y de una te acompañamos en los sentimientos.
ResponderEliminarQue nos toman por imbéciles está claro, que lo seamos, no tanto. Al menos no todos.
Pero yo me pregunto y os pregunto: ¿Alguna vez dejará de repetirse la historia?
Aunque lo primero sería debatir ¿que es dios?, y eso está claro que nos llevará mucho tiempo...resumiremos.
ResponderEliminarTengo claro que la gente con mucho poder, roba mucho y hace mucho mal, pero...¿por ser más malos que yo mismo? o ¿sencillamente por que tienen más poder?. Es decir yo he trabajado y he estado cobrando del paro. No puedo robar millones de euros pero eso si puedo hacerlo. Claramente me justifico por que lo hago. ellos me roban me insultan a impuestos y tal y tal. Pero el caso es que yo "robo". En mis tiempos buenos económicos, he tenido un coche, y aunque podría dar mil motivos por lo cual es necesario tenerlo, no podría más que hundirme intentando justificar por que compré un todo terreno que tiene un consumo mucho más elevado y contamina por lo tanto el doble que un coche normal. Esto nos lleva que por puro capricho yo contamino más de lo qeu debería.
Los ejemplos son miles, pero recuerdo que estamos resumiendo XD.
Por lo tanto yo digo: " Dios existe, como está en todas partes está en nosotros. Como algo puro e indivisible la parte en nosotros es una parte tan pura como el original. Dios somos nosotros, y tenemos mucho por hacer sin tener que mirar afuera. Nosotros somos dios, y tenemos que hacer fuerza para cada día ser mejor. Tenemos la fuerza para ser mejores. Si algo hicimos mal, si robamos, si contaminamos más de lo debido, bueno ya está pasado y no podemos hacer nada. Pero el siguiente paso podemos intentarlo hacerlo mejor. Sabemos hacerlo mejor.
Dejemos de mirar fuera y demos el siguiente paso desde el corazón, lo mejor que podamos.
Lo importante no es haber sido bueno. Ni siquiera ser bueno ahora, lo que importa es ser mejor hoy que ayer..... Vamos a por ello.
Supongo que todos no somos imbéciles, es notorio, sin embargo, (y lacerante) el mérito de no serlo, dada la descomunal fuerza de los medios que poseen los pastores de nuestros predecibles rebaños “democráticos” para reducir a los pueblos a la indolente estulticia.
ResponderEliminarHan logrado acostumbrarnos al horror y ya no es noticia que una bomba aliada (siempre inteligente y bienintencionada) acabe con la vida de quince o veinte niños en Afganistán. Ni siquiera se molestan en utilizar los recurrentes eufemismos con que solían camuflar estos abominables crímenes. Simplemente, tales hechos ya están interiorizados como normales por la población y no suscitan en ella interés informativo ni inquietud alguna. No es noticia.
El propio ataque a Libia ha merecido una atención muy limitada (aunque unánime) de los medios de comunicación si lo comparamos con similares hechos precedentes.
La unanimidad indisimulada de los medios de comunicación, que los delata como distintas voces de un mismo amo, pone de manifiesto que los pastores poseen la absoluta seguridad de que estamos suficientemente domados. Como ciudadanos ejemplares limitaremos la velocidad de nuestros automóviles para que no les falte combustible a los caza bombarderos de la paz, en su filantrópica misión de masacrar libios, liberándolos así de los insufribles agravios a que los viene sometiendo el pérfido Gadafi y evitando con ello que sea él quien los mate. Será miel sobre hojuelas si, además, conseguimos curar al sátrapa de esa inconveniente manía que le ha entrado de nacionalizar las riquezas minerales de su país, desviación que ha hecho que, de pronto, comiencen a crecerle cuernos, rabo y tridente, y que en los asépticos salones de Londres, París o Madrid se hable de la posibilidad de matarle como si se tratara de tomar un café.
Para todo ello seremos generosos y aceptaremos que parte de nuestras futuras pensiones, de nuestros subsidios de desempleo, educación, sanidad, etc… se inviertan en misiles sanguinarios arrojados con presteza y prodigalidad y que, dicho sea de paso, cuestan un pastizal. Hágase todo por que las sacrosantas corporaciones y los mercados vean asegurados e incrementados sus astronómicos beneficios.
Podría abordar ahora algunas consideraciones morales de esta infamia, podría hablar del vergonzoso “amparo” de la ONU, que extingue la ya escasa credibilidad que pudiera tener esta institución y que traiciona definitivamente los principios y las intenciones que la inspiraron, podría hablar de la volubilidad de algunos progres de salón que parecen incapaces de ver que estos misiles y estos aviones son los mismos de siempre y provocan los mismos efectos, que estas bombas matan en el acto y, además, contienen materiales radiactivos que condenan a enfermar y a morir a la gente de varias generaciones, y que solo por eso ya proclaman la verdadera naturaleza criminal y maléfica de quienes ordenan usarlos, de quienes apoyan su utilización y de quienes la justifican. Podría hablar de todo esto y de muchas cosas más, pero me crecería la rabia, y recaería en el odio, lo cual siempre es victoria de la infamia que menea estos hilos.
Ahora el malo malísimo es Gadafi. ¿Quién será el próximo? Cuándo nos tocará a nosotros?
La historia se repite hasta que acaba, luego comienza un nuevo ciclo de repeticiones comenzando de nuevo en la prehistoria.
Los dos comentarios que siguen realmente son de Tomy, pero por alguna extraña razón no puedo publicarlos directamente como los demás.
ResponderEliminarTomy dijo:
Bueno como veo que importa un poco las intrigas de libia, voy hacer un ctrl paste de una de las páginas que visito cada día.
De lo que no se sabe de Gadafi.
Gadafi controlaba el 98% de toda la economía de AFRICA, ayudando a desarrollar esa región del planeta, de la que tantos otros Países solo recuerdan que sale en Google earth.
Consiguió frenar la inmigración de africanos hacia Europa pagando un sueldo de 800 EUROS a cada uno por trabajar en su País de origen en empresas creadas por él.
Ha realizado grandes y millonarias inversiones en toda África occidental con varios objetivos:
1. Frenar la inmigración a Europa.
2. Dar asistencia a países pobres de Africa.
3. Conseguir contratos de crudo en esos países.
4. Hacer de África un continente próspero.
En su proyecto en el cual participaban muchos españoles a nivel particular como grandes empresas (OHL, VOLCONSA, DRAGADOS, ACE, GRUPO COBRA, REPSOL, ETC) han sido coaccionados por nuestro gobierno para abandonar las acciones humanitarias.
Principalmente, empresas de Barcelona, Valencia, Madrid y Alicante gestionaban los contratos millonarios entre estas empresas y el gobierno Libio, así como, con otras empresas internacionales.
No solo el pueblo Libio está dispuesto a morir por Gadafi, también toda África y muchos otros.
El ha financiado proyectos universitarios españoles para crear agricultura en desiertos que hasta ahora ejecutaban empresas españolas y suizas.
Desconocemos el paradero de muchos españoles. Sabemos que han sido secuestrados por mercenarios Europeos que instigaron las falsas revueltas en Libia.
Su segunda mayor fortuna está en Italia de la mano del Príncipe de Qatar. Gadafi, conseguía grandes contratos de perforación en África para petróleo y gas, para sus amigos Europeos.
Entre ellos, tiene contratado la mayor reserva de petróleo y gas natural del mundo que se encuentra entre Senegal y Brasil, en el Atlántico. Desde Valencia, Malí y Cabo Verde se lleva esa gestión. Esto último es uno de los principales objetivos de la nueva coalición internacional.
(continúa)
(sigue)
ResponderEliminarRusia, China, Italia y principalmente Alemania se han negado en la ONU porque tienen subcontratas con Libia para estas reservas. Italia (realmente Berlusconi) ha sido obligado a participar aportando bases por su aproximación a Libia. Pero Italia no quería participar.
Es verdad que financió la campaña electoral de Sarkozy. Y Sarkozy le ha traicionado. Es verdad que han habido revueltas de LIBERTAD en el norte de África y las sigue habiendo. Todas son reales, son del pueblo... no del NWO, aunque se nos haya querido hacer creer lo contrario por los falsimedios y los conspiranoicos a sueldo.
Pero la de Libia sí que ha sido infundada y manipulada... porque el pueblo de Libia SI ama a su lider, al Coronel Muamar el Gadafi. Hoy he visto a Obama en rueda de prensa en Brasil.
En su agenda oculta, él quiere hacerse con el contrato de perforación que tiene Gadafi con Cabo Verde y Brasil. Mucha gente más (españoles) tenían su futuro en ese contrato, el cual destinaban un 10% de los beneficios para bien social de Senegal, Cabo Verde y Brasil.
Quieren la guerra y me parece que la van a tener, porque con el hambre de los pueblos YA NO SE JUEGA. A Gadafi le siguen llamando el Padre de África.
En el 2003 consiguió abolir la esclavitud en toda África junto a El Hadrami Ould Brahim de Mauritania (que falleció de un extraño cáncer en 2007) en colaboración con Cruz Roja Internacional de España.
Este acontecimiento nunca se hizo público. Financió gran parte del Mundial de Fútbol 2010 (Sudáfrica) para crear trabajo en ese país y parar la emigración de sus ciudadanos hacia Europa y ahora LE TRAICIONAN! Por el contrato de petróleo y gas.
En Mauritania tienen un grupo preparando desde hace 6 meses una gran plataforma financiera, para ayudar a esa región de África. Gadafi está muy de acuerdo con ello. Pero los fondos provienen de bancos europeos y americanos contrarios al NWO.
Pero siento hacerles llegar este mensaje a la coalición, el contrato que tanto anhelan ha sido recuperado o sea que hagáis lo que hagáis perdéis el tiempo en Libia.
¿Aún piensa alguien que este señor es tan malote? o ¿que sus amigos lo atacan por defender a su pueblo? Si nosotros que no tenemos los medios, ni la financiación de una gran operadora de informaciones. Conseguimos todo esto, ¿qué pasa con vosotros grandes medios? Ha se me olvidaba que a nosotros no nos pagan los políticos/banqueros por callarnos.
La intervención en directo: Aquí.
Ahora ¿quién paga la factura? el de siempre, el pueblo.
Antes que nada quiero decir a la editora de este foro tan apasionante que, me cuesta mucho leer este tipo de letra. Sí, queda muy bonico y no digo yo que se cambie. Sólo digo que me cuesta mucho leer los comentarios y todo en general, quizá sean los años, que le vamos a hacer.
ResponderEliminarBueno me ha gustado mucho este hilo de debate, y me alegra comprobar que mi "amigo" Gadafi no ha cambiado con los años. Cuando conocí su país de norte a sur y algún rato compartimos con su hijo en unas ruedas de prensa, ya vimos los allí presentes que nos estaban vendiendo la moto muy mal, no los libios, sino los mismos sátrapas de siempre y sus gandalla de acólitos que en cada momento le toca interpretar el papel de monigote del Tío Sam. Lo que allí vimos fue un pueblo que en nada se parecía a ningún país de los muchos que he visitado en África, se respiraba lo que hoy entendemos por buen "rollito" del pueblo en general con su lider Gadafi, los niños y niñas, sí digo y niñas todos perfectamente aseados y uniformados asistian a los colegios en modernos autobuses que circulaban tanto por el autopistas en el desierto como en Tripoli. Que este tipo tan malo malísisimo, repartía y compartía con su pueblo. Y este sin duda es su pecado. Querer compartir de una forma más ecuánime y justa que este atajo de demócratas que nos vacían los bolsillos sin misericordia. Dios, Dios...
No se si Dios existe ni me importa una mierda, lo que sí se, es que esta carroña de personajillos inmisericordes con sus pueblos y que nos gobiernan, desde La Moncloa, El Santander o la Mismísima Casa Blanca o donde quieran que tenga sus pútridas guaridas, antes que tarde les corroera las entrañas la ponzoña de su propio veneno. A nosotros nos nos han vacunado y tan bien vacunados que ya no sentimos ni padecemos. Nos da igual que nos revienten una nuclear en nuestro cuarto de baño, que nos bajen los sueldos y nos digan que es por el bien de nuestra salud emocional, O como ha dicho hoy "Zapatitos" que dicho sea de paso maldita sea la hora que lo vote, Pues este iluminado hoy ha dicho que la intervención en Libia es de caracter humanitario, será simberguenza y gilipollas. Ah! Claro que burro soy, humanitaria para ellos, los demás es que como no somos humanos,moros, reaccionarios, antisistema, etc.
Todas las civilizaciones guerreras y ambiciosas por poderosas que hayan sido han terminado sucumbiendo a sus desmanes. Pero las que han respetado Las Leyes Naturales siempre han florecido para difuminarse, no se si con el más acá o con el más allá. Eso si siempre con el resplandor de ese otro mundo que también existe y no cesan en el empeño de ocultárnoslo.
Pero jugamos con ventaja, ellos no saben que lo sabemos y lo conocemos aunque nos lo hagan pagar con gotas de sangre sin ellos saberlo
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ResponderEliminarNo eres el único que maldice la hora en que votó a Zapatero. Tal acción, sin embargo, no te convierte en cómplice de sus actuales crímenes, pues la intención que guiaba tu mano hacia la urna con la ahora ominosa papeleta era, seguro estoy, asaz distante de los presentes derroteros que ha venido en adoptar el infame y mendaz presidente.
Te comprendo. Y te sugiero ahora contemplar el aspecto positivo que tiene la acidez del errado sufragio. Ha sido una lección un tanto amarga, pero seguramente necesaria para seguir creciendo. Tuerce en aprendizaje el arrepentimiento. Tú puedes y tú sabes. Seguramente ya lo has hecho.
Hoy se ha consumado en los planos estéticos la histórica felonía. El parlamento ha aprobado por una reveladora mayoría, rayana en la siempre sospechosa unanimidad, que este país macule nuevamente sus manos con lágrimas y sangre.
Si califico de reveladora esa aplastante mayoría es porque, en mi opinión, supone la clamorosa constatación de que existe una especie de pensamiento único, de corte dictatorial, para lo esencial, mientras que en lo accesorio se prodiga el fingimiento de teatrales discrepancias que pretenden transmitir la impresión de que la democracia acoge muy diversas maneras de pensar.
Sorprende, sin embargo, la tácita aceptación de partidos como ICV, cuya última sigla, si no estoy equivocado, significa Verds (Verdes). Le supongo al vocablo una acepción que le identifica con el ecologismo, respetable y admirable manera de pensar, sentir y actuar que se compadece poco con la indiscriminada siembra de uranio empobrecido que están avalando con su voto o con su abstención.
Me resisto a pensar que ese 99 por cien del parlamento que ha dado su inequívoco sí a la guerra represente con fidelidad a la sociedad española. Sería terrible. Seria para tomar una patera y cruzar el estrecho, ligeros de equipaje, en viaje sin retorno. Aunque nunca hemos de decir este agua no cruzaré, creo, más bien, que el hemiciclo de las cortes españolas, antes que foro de representación de la ciudadanía, es vulgar patio de Monipodio, donde se reúne para planificar y perpetrar sus fechoría, lo más granado de la delincuencia española de alto estanding. Por lo pronto se salva Izquierda Unida y justo es reconocerles el ímprobo esfuerzo de nadar contra corriente y de llevar a la vergonzosa sesión, la voz de su millón de votantes (tan escasa e injustamente representados debido al latrocinio de las leyes electorales, diseñadas para garantizar que “democracia” no pase nunca de ser una utopía) junto a las voces de quienes no estamos, acaso nunca hayamos estado y quizá jamás estaremos, representados en la cámara.
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Cuando comenzó la invasión de Irak, una más de las infames batallas de esta larga guerra, hubo claras señales en la tierra y en el cielo que anunciaban llegado el principio del fin de nuestra dudosa civilización y que lo asociaban con esa guerra y sus tiempos. Desde entonces hasta ahora, el todopoderoso Occidente no ha parado de hundirse en la miseria, lastrado, esencialmente, por la desbocada codicia de sus verdaderos gobernantes.
Quizá sea la ciega prepotencia, la vanidosa estupidez o, simplemente, la vasta necedad, lo que haya llevado a nuestros fatuos líderes a elegir para el inicio de esta nueva batalla, en claro desafío a las señales, precisamente la misma fecha en que iniciaron sus actos criminales en la tierra del Éufrates y el Tigris, madre de nuestra historia, su principio y tal vez su fin. Tal parece que fuera una guerra contra la primavera.
Por si acaso el presidente Zapa no hubiera entrado irremediablemente en el “lado oscuro”, por si quedara en él algo de lo que un día pareció tener, voy a atreverme a dejarle un sucinto consejo: Si lo que desea realmente es salvar algún pueblo, no es necesario que lo busque en ultramar. El pueblo español, sin ir más lejos, ya está en algunos casos al borde del hambre y, en general, vive peor de lo que vivían los libios antes de comenzar a ser “salvados”. Use su señoría de los caudales públicos que tan alegremente dilapida en pólvora por tierras extranjeras, para paliar las básicas necesidades crecientemente insatisfechas de sus conciudadanos.
En fin, amigos, lo que importa, al decir de Tomy (con quien estoy de acuerdo) es ser mejores hoy, que ayer. Para eso quizá sea necesario apartarse un poco de todas estas abominaciones que acostumbran conducirnos a la rabia, a la impotencia y al rencor, estados que suelen complacer a los que nos gobiernan procurando guiarnos a sus turbios rediles por espurios caminos de odio y miedo.
La paz, amigos míos.
En primer lugar quería agradecer a nuestro querido amigo Anónimo :-) la observación acerca de la fuente con la que inauguré la tertulia. Espero que con este nuevo tipo de letra quede, al menos, igual de bonico, pero se entienda mejor el contenido, que es de lo que se trata.
ResponderEliminarComo creo que soy incapaz de aportar nada nuevo a lo ya dicho por quienes habéis intervenido hasta el momento, en esta conversación, me voy a permitir la licencia de tomar una idea, tangencial al tema, de cada uno de vosotros y voy a intentar conjugarlas, porque creo que en ellas está la esencia de lo que nos une como amigos.
Tomy, dices que acaso nos llevaría demasiado tiempo debatir acerca de la naturaleza de dios, sin embargo al final del mismo comentario dices: “Nosotros somos dios”, y con eso, en mi opinión, está todo dicho (aunque nunca hay que descartar un debate sobre el tema).
Anónimo, dices que las civilizaciones que han respetado las Leyes Naturales siempre han florecido para difuminarse, no sabes si con el más acá o con el más allá y proclamas con ello la existencia de otro mundo ocultado, pero, en mi opinión, absolutamente cierto.
Floren, acabas tu sentido lamento (que iniciaste con un ensangrentado No a la guerra, poniendo a la Luna por testigo, y acabaste con un vivo deseo de Paz) diciendo que para ser mejores hoy, que ayer, quizá sea necesario apartarse un poco de todas estas abominaciones que acostumbran conducirnos a la rabia, a la impotencia y al rencor. Sentimientos todos ellos comprensibles frente a estas tristes situaciones, pero que, efectivamente, no hacen más que contaminar ese mundo al que se refiere nuestro amigo anónimo y profanar esa bella idea del dios que nos habita, al que se refiere Tomy.
Ya conocéis mi debilidad por un libro que recomendé en este mismo espacio, Mensaje desde la Eternidad. Perdonar que me repita pero es que quiero deciros algo y no encuentro las palabras adecuadas, sin embargo las palabras que se adecúan perfectamente a mi pensamiento las encontré en este libro y ahora quiero transcribir para vosotros algunas líneas:
“En la Eternidad y en todo lo que emana de ella no existen los errores. No puedes equivocarte porque, en definitiva, eres libre de explorar tu propio don en la dirección que consideres más adecuada en cada momento. Pero sí puede ocurrir que, al observar algo que ocurre a tu alrededor, llegues a intuir, sin juzgarlo como acertado o erróneo, que su olor, sabor o tacto no son compatibles con el camino que has elegido. Entonces bendices aquello con lo que no comulgas y sigues adelante. Sólo así podrás llegar a amar a todos tus semejantes. No tienen por qué gustarte sus actos ni la forma en que eligen comportarse, pero te abstienes de juzgar a la persona. Sencillamente llegas a la conclusión de que no forma parte de tu camino y no canalizas ninguna energía en esa dirección: ni palabras, ni acciones, ni pensamientos. Si juzgas, debes aprender también a perdonar: perdonar a los demás, perdonar las circunstancias, perdonarte a ti mismo. En cambio, cuando te limitas a observar sin emitir juicios, no hay nada que perdonar.”
Yo estoy segura que el mundo cambiará cuando culmine nuestra revolución personal, lo que no quiere decir que si en el camino de alguien está acelerar esa revolución desde el grupo, no deba hacerlo. Pero por supuesto, no tengo que aclararos a vosotros que esa revolución a la que me refiero, para que sea efectiva, siempre habrá de ser pacífica y conducida desde el Amor.
En fin amigos, os sugiero serenar nuestra alma que en el fondo es lo único que nos pertenece y, acaso, ni siquiera en exclusiva.
Un fuerte abrazo.
Sí, efectivamente mucho mejor el tipo de letra e igual de bonico. este tipo se adecua mejor a mis neuronas. Que no quiere decir que sea igual para todos.
ResponderEliminarPor mi parte gracias.
Queridos amigos. Yo sé que me voy a arrepentir, pero he dejado una carta abierta en el blog de un lider de la formación política EQUO, un grupo de reciente creación que se autodefine de izquierdas y verde, pero que defiende los bombardeos de la OTAN sobre Libia. Aquí os dejo copia, por si os resulta de interés.
ResponderEliminarPARA ALEJANDRO SÁNCHEZ
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La incondicional defensa de la agresión y el acrítico aval que su formación política da a la nueva guerra de la OTAN, me han llevado estos días, en tortuoso viaje, del desconcierto a la tristeza pasando por el asombro.
Luego de decidir no volver a votar al PSOE, debido a sus agresivas medidas antisociales, encontré en EQUO un atractivo referente para mis inquietudes, mis sentimientos, mis ideas y, por ende, mis futuros votos. Tal hallazgo me deparó una grata sensación de sosiego, pues, luego de haber sido votante de IU y del PSOE, me encontraba ante un horizonte despoblado y yermo tal como deben ser los desiertos líbicos.
Me dirigía hacia ustedes con ilusión y esperanza. Veía su formación en el otero como un oasis verde y progresista en los áridos eriales del actual panorama político. Pero, oh desolación, lo que yo estaba viendo era un fantasmagórico y cruel espejismo.
No es mi intención disuadirle, señor Alejandro Sánchez, de su empeño belicista, ni exponer ante usted las numerosas evidencias que delatan clamorosamente las verdaderas causas e intenciones de esta guerra, infame como todas, le supongo poseedor de muy buenas razones para defender lo que defiende, pero permítame al menos que le traslade mi perplejidad por algunos de sus argumentos. Me sorprende que sostengan ustedes, sin pudor alguno, que esta es una intervención humanitaria, que su intención es salvar vidas libias, y que tan filantrópicos designios solo pueden lograrse a base de bombardear ciudades. Todos sabemos cuáles son los deseos y las ambiciones reales que han encendido siempre la mecha de las guerras, también conocemos los varios, diversos y siempre nobles pretextos con que la propaganda ha intentado justificar en cada caso las acciones más injustificables de la humanidad, las guerras de agresión. No me puedo creer que usted no lo sepa también.
Como no puedo dar crédito (ya me perdonará usted si me equivoco) a la ignorancia que aduce sobre la naturaleza del armamento que utiliza la OTAN. La presencia de uranio empobrecido en las bombas que, con su venia, se arrojan sobre las ciudades libias, es algo conocido, público y notorio, pues quienes las esparcen con prodigalidad y abundancia, no se molestan en ocultarlo. Antes bien, lo proclaman con arrogante orgullo. No deja de asombrar que alguien que se califica a sí mismo de ecologista, apruebe con tan fervoroso entusiasmo estas acciones que contaminan la tierra y el aire, condenando a enfermar y a morir por igual a culpables e inocentes de aquel, por rico, infortunado país, durante un indeterminado número de años, incluyendo a muchas personas no nacidas aún que ya me dirá usted cuáles son sus culpas para tener que pagar tan alto precio.
PARA ALEJANDRO SÁNCHEZ
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¿Qué podríamos haber hecho, si no, ante los horrendos crímenes del sátrapa? Se pregunta usted. Yo no poseo la respuesta, pero sé claramente lo que no podemos, lo que no debemos hacer: No debemos destruir, no debemos hundir a otro país en la prehistoria, no debemos matarles, no debemos robarles. De los crímenes de Gadafi, el responsable es él; de los nuestros, lo somos nosotros. Y el amparo de una resolución de la ONU, no puede mitigar el desamparo de los miles de vidas arruinadas y reducidas a escombros por las bombas.
Estoy convencido de que sus razones para apoyar esta guerra son más potentes que cualquiera de los cada vez más numerosos argumentos que hay en contra y que crecen en la medida en que las potencias agresoras van prescindiendo de sus iniciales máscaras. Pero quiero informarle (aunque ya usted lo sepa) que el célebre mandato de la ONU, cuyos límites, a su decir, no deben rebasarse, ya ha sido ampliamente superado y que las potencias libertadoras están armando indisimuladamente a los pacíficos rebeldes para que acaricien al resto de los libios.
Estoy convencido de que nada de esto, ni siquiera las ya iniciadas y en cualquier caso previsibles matanzas de gadafistas, de libios que van por libre y, en general de no adeptos a las nuevas causas, van a hacer que usted reconsidere su opinión.
No, ya no les votaré a ustedes, y nadie de mis círculos va a hacerlo, pero estoy convencido que eso le importa tanto como a los "libertadores aliados" la salud y las vidas de sus "liberados": Un soberano pito.
Disculpe las molestias y reciba un saludo. Gracias por su atención si es que la he merecido.
Pues espero sirva de algo.
ResponderEliminarCon respecto al tema político, hace ya algún año, que superé lo de no creer en algunos partidos políticos, para pasar a no creer en el sistema político. Es por ello, que le dedico tiempo nulo, y que no me molesto en votar.... a nadie.
El sistema en general falla desde casi lo más bajo, aunque no en esencia.
Con respecto a lo de no votar.
ResponderEliminarAunque yo sea una ingenua y una ignorante y al final resulta que el hecho de votar es indiferente a los poderes establecidos, ¿por que no molestarse en ello? Al fin y al cabo es una de las pocas molestias a las que tenemos derecho, no?
Bueno Floren, qué decir ante tan nefasta desvencijada estructura social. Quizá debamos entonar un "mea culpa" y mearnos, de paso, en la calavera de unos cuantos que nos han venido engañando, muy hábilmente, en estos últimos años. Llámnese EQUO, PAZ, IGNACIO RAMONET, ETC.
ResponderEliminarQuizá seamos nosotros, realmente los equivocados, y lo justo y necesario sea esto de masacrar países y vidas humanas, dejando a su paso muerte y destrucción, despojos humanos físicos y mentales, y todo ello, a cambio de petroleo, tecnología, eso sí, siempre dentro de los marcos de la ONU y bajo el sello de "MISIÓN HUMANITARIA" ¿Tan grande es la cara de gilipollas que tenemos?
Ellos tienen el poder, yo sólo puedo mearme en sus calaveras de forma virtual y no mucho rato; pues la próstata ya no me permite grandes alardes en lo que a la micción se refiere.
Sé que no quedan bien estas cosas de insultar y decir palabras soeces, pero como me considero un ser en evolución y en periodo de aprendizaje y para nada perfecto, no veas lo a gusto que me quedo. ¿Qué me parezco a ellos? Quizá, o eso es lo que también nos quieren hacer creer. Tomes el camino que tomes siempre culpable por el mero hecho de haber nacido. Me voy que me meo.
Lo de no votar, es simplemente por que me siento manipulado, e ir a las urnas para mí forma de verlo, es decir que juego a sus normas, que soy como ellos quieren y elijo a uno (que a ellos les da igual cual).
ResponderEliminarEs un derecho que me han dado para sentirme importante y hacerme creer que así tengo la forma de cambiar las cosas. Pero sé que no lo hago. Sencillamente cuando voy a las urnas me veo haciendo lo que ellos quieren que haga. Y la verdad ya no me apetece jugar con su pelota....ya no.